Edificio de la Facultad de Odontología de la Universidad de la República. Surge de un concurso público en 1929, el que es obtenido por los arquitectos Juan Antonio Rius y Rodolfo Amargós. Se inaugura en 1940 con un proyecto que difiere del ganador del concurso. Sus dependencias se orientan a la enseñanza, investigación y extensión vinculadas a la salud odontológica. El edificio original contaba con 6.700 m2 y actualmente, producto de varias ampliaciones, cuenta con 10.400m2
Los dos edificios se ubican en la peculiar manzana de 12 hectáreas, hoy denominada predio de la salud, inmediata al Parque Batlle que incluye además, al Hospital de Clínicas con 150.000m2, al Instituto de Traumatología, al Instituto de Reumatología, al Comedor universitario y al Centro Uruguayo de Imagenología Molecular. Actualmente se construye en el predio el edificio para las Escuelas de Enfermería, Nutrición, Parteras y Tecnología médica.
De la perspectiva del proyecto que obtiene el primer premio del concurso en 1929 a cargo de los arquitectos Rius y Amargós. se observa que la propuesta original tenía un mayor talante expresionista que la construida, y de hecho fue elogiada por Le Corbusier en su visita a Montevideo en el año 1929.
* Extraido de: Anticipaciones dos máquinas en sombra. Autor: Marcelo Roux y Equipo. Mención Premio Vilamajó Edición 2015.
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(…) Las ventajas del primer premio están concretadas en su buena composición general, diferenciación y agrupación de funciones, comodidad, facilidad de funcionamiento y adaptación al terreno.
En esas actas se hace constar también, por algunos de los Miembros del jurado, sus reservas sobre la arquitectura empleada en el primer premio, la oportunidad y conveniencia de dejar un espacio libre en la misma esquina del edificio y sobre las condiciones económicas de dicho primer premio, haciéndose notar sin embargo, que a pesar de eso resultaba de más valor y con ventajas sobre el segundo premio.
La dirección de la obra de acuerdo con las Bases del Concurso ha sido encomendada a los autores del proyecto premiado, quien ha sido encomendada la urgencia con que se necesita este nuevo edificio, se han puesto inmediatamente a confeccionar los planos definitivos, de manera que pronto contará esa facultad con el local que su rápido crecimiento y constante progreso le exigen imperiosamente. (…)
* Fallo del jurado. Sociedad de Arquitectos del Uruguay. Número 144 (1929) Pág. 215. Escuela de Odontología
